martes, 28 de diciembre de 2021

¿Por qué creemos ser libres si no es verdad?

 "La libertad se ha usado como máscara agradable de un sistema que promueve precisamente su contrario". 

Usted tal vez despierte cada mañana creyéndose libre, o quizá ni piensa en este concepto a la altura de la justicia y la igualdad. Se despierta y sabe que, teléfono inteligente en mano, podrá expresarse libremente en una red social. Usted puede opinar y cabe la posibilidad de que alguien lo escuche. No repara en la libertad -o la da por asumida- porque "su lenguaje impregna nuestra vida".

Sostenemos, por un lado, "que el deseo de libertad no se extingue" y, por otro, que nos han robado la sensación -incluso el sentimiento- de ser libres, y de tener una Cuba Libre:.

NO TENEMOS "Ni Libre mercado, Ni libre comercio, Ni elecciones libres, Ni medios libres, Ni libre pensamiento, Ni libertad de expresión, Ni libre albedrío... 

Existen muchas libertades pero en la barahúnda de intentos por definirla, el ideal de libertad ha sido desplazado, estirado, retorcido, desgarrado, hábilmente moldeado para adecuarse a los intereses de los que tienen el poder para darle forma.

Por todo lo anterior, llaman la atención -o como se dice ahora, se hicieron virales- las imágenes que acompañan estas líneas, porque muestran personas ejerciendo su libertad en escenarios donde nadie la espera. 

Arrebatos de valentía, actos de liberación donde mi pueblo sufrido encontro una luz de esperanza para ser parte de los seres humanos libres. 

 " -hoy lo que hay que hacer es un uso virtuoso de la libertad, porque ésta ha llegado a su máximo y, sin embargo, se sigue violando". "Hay, a la vez, una legitimación de los límites y un desprestigio de los mismos"

- La historia oficial es que vivimos en sociedades libres y democráticas porque permiten que diferentes voces puedan expresarse y que cada quien elija su información. Pero no podemos contentarnos con esto porque esta afirmación es una verdad que contiene una ilusión; hablamos de una libertad formal y no sustancial. 

 El Gobierno Socialista Cubano, nos mantienen en un estado de falsa conciencia. Se nos ha vendido que vivimos en una sociedad libre pero hemos de preguntarnos constantemente cuánta libertad tenemos, cuáles son sus límites y por qué no tenemos más.

Vivimos una época en la que todo el mundo se cree libre porque así se lo han dicho los que tienen interés en que nos sometamos a la norma más conveniente, como nunca antes, de manera consciente. Somos libres como consumidores estandarizados o no, pero poco más. Como sujetos políticos, nos comportamos como en el supermercado, eligiendo entre la oferta disponible sin poder hacer nada más.

A medida que se avanza en el camino hacia a la libertad todo se complica. "¿Qué es lo que valoramos realmente? ¿Vamos a aceptar los valores heredados? Acabaríamos llevando vidas infelices porque se nos enseña que el camino a la felicidad es la riqueza y el poder. Ponemos mucho valor en esos objetivos y, a menudo, actuamos en contra de nuestros propios intereses. Lo primero que tenemos que hacer es cuestionarnos profundamente nuestras creencias y valores".

Y usted, que está leyendo, dirá: Bueno, ¿y qué más? Ahí va: Asumir que, "en cada sociedad, la gente está moldeada para satisfacer las necesidades de los que tienen el poder", y que "para crear una sociedad más libre y descentralizar ese poder hemos de ser honestos sobre nuestras limitaciones y cuestionar las fuerzas que nos han moldeado porque, si nos las creemos sin cuestionar nos convertimos en agentes de esas mismas fuerzas".