jueves, 27 de mayo de 2021

Adhesión al manifiesto de Patria y Vida: libertad para sus artistas

 Súmate al manifiesto por la libertad de Maykel Osorbo, El Funky y Luis Manuel Otero Alcántara a través de este formulario. No importa si no eres cubano. No importa si no eres famoso, artista, literato, político, activista o académico. pues hay un lugar para todos en este reclamo.

No lo dudes, es la unión de todos, cubanos y no cubanos, la que traerá la democracia a Cuba y la que hará que los artistas de Patria y Vida no sean detenidos, procesados, incomunicados y desparecidos. Si quieres leer el manifiesto, puedes descargarlo aquí (ES / EN / FR), o puedes leerlo más abajo sin salir de esta página.

Patria y Vida

               El Funky, Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Osorbo, artistas de Patria y Vida


Los artistas de Patria y Vida han sido secuestrados, desaparecidos y procesados por el Estado Cubano

Convocamos con este manifiesto a todos los cubanos en el mundo al llamado de Patria y Vida, por la libertad de Cuba

 El terror de los meses de abril y mayo en Cuba, han estado marcados por la represión y el acoso de la Seguridad del Estado a artistas, activistas y periodistas independientes. A raíz de la popularidad de la canción Patria y Vida creció el asedio del gobierno sobre Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel (Osorbo) Castillo Pérez, fundamentalmente.

jueves, 6 de mayo de 2021

El Estado cubano principal agresor contra la prensa en Cuba


Los agentes estatales son la principal fuente de amenazas y agresiones contra la prensa en Cuba, afirma la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en su informe anual 2020, donde resume los hechos más relevantes vinculados con la situación del derecho a la libertad de expresión en el hemisferio, entre ellos los de Cuba.

"Durante el 2020, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión registró continuidad en el patrón de restricciones a la libertad de expresión y al acceso a información pública en la isla. En particular, se han observado actos de amenazas, hostigamiento y persecución contra periodistas, disidentes, activistas, artistas y docentes que cuestionan al régimen o que difunden información u opiniones sobre temas de interés público. Si bien las formas de hostigamiento y las restricciones oficiales no son nuevas, la CIDH y su Relatoría observan que se han incrementado en el 2020 en el marco de la pandemia. En la mayoría de los casos, la persecución contra expresiones críticas por parte del Departamento de Seguridad del Estado se amparó en las disposiciones del Decreto-Ley 370 “sobre la informatización de la sociedad en Cuba”", señala el reporte anual elaborado a partir de numerosas fuentes, incluyendo medios de prensa independientes y nuestro sitio web www.radiotelevisionmarti.com, con decenas de menciones en el informe.

La Relatoría Especial alude a denuncias de bloqueos de determinadas aplicaciones y sitios web, interferencias y alteración de saldo de datos móviles por parte del gobierno, principalmente en un contexto de clima social agitado y convocatorias a protestas, impidiendo la comunicación y coordinación de los ciudadanos.

El organismo señala que "las autoridades estatales utilizaron la grave crisis generada por el Covid-19 para intimidar y hostigar de forma sistemática a periodistas que trabajan para medios independientes y detalla los casos de Yoe Suárez, Camila Acosta, Waldo Fernández Cuenca, Esteban Rodríguez, Julio Aleaga Pesant, Iliana Hernández, Niober García Fournier, Mónica Baró, Osniel Carmona, Jorge Enrique Rodríguez, Héctor Miguel Sierra, Emilio Almaguer de la Cruz, Yadisley Rodríguez Ramírez, Abraham Jiménez Enoa, Luz Escobar, Carlos Manuel Álvarez, Reinaldo Escobar, Roberto Quiñones y Héctor Luis Valdés Cocho, entre otros comunicadores y activistas.

La entidad recuerda al Estado de Cuba que el periodismo es la manifestación primaria y principal de la libertad de expresión y los Estados tienen la obligación positiva de propiciar un entorno de trabajo seguro para la prensa.

"El Estado debe brindar a la prensa el más alto grado de protección para que puedan realizar su trabajo libremente y mantener a la sociedad informada sobre asuntos de interés público", indica la Relatoría.

Cuba muestra "una acentuada intolerancia en relación a las manifestaciones artísticas que pudieran poner en cuestión ya sea las bondades del sistema político o los aciertos del grupo dirigente", asegura el reporte y añade que "la discrepancia ideológica ha sido motivo para impedir expresiones artísticas de diversa naturaleza que tienen como fin la protesta".

La CIDH ha recomendado al Estado de Cuba poner fin al hostigamiento, incluyendo citaciones, detenciones de cualquier duración, y acoso judicial a cualquier persona por causas relacionadas al ejercicio de su libertad de expresión, libertad de asociación, reunión u otros conexos.

La Relatoría recuerda que tanto la Declaración Universal de Derechos Humanos y la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, así como el Artículo 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, firmado por Cuba el 28 de febrero 2008, protegen la labor periodística, artística y la defensa de los derechos humanos. De tal modo, quienes se expresan de forma legítima no deberían sufrir presión al ejercer su labor, cubrir y/o difundir los hechos de interés público.




Voces del Sur exige al régimen cubano la inmediata liberación de la reportera Mary Karla Ares.



 (ICLEP) – El Proyecto regional Voces del Sur, se une a las organizaciones regionales e internacionales que exigen al régimen cubano la inmediata liberación de la periodista del ICLEP Mary Karla Ares, arrestada desde el 30 de abril último por reportar en directo la represión que fuerzas combinadas de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y la Policía Política desataron contra un grupo de manifestantes pacíficos en la calle Obispo en La Habana.

“Desde Voces del Sur exigimos al régimen cubano, en el marco del día mundial de la libertad de la libertad de prensa, la inmediata liberación y sin condición alguna de la reportera Mary Karla Ares. Asimismo, nos solidarizamos con sus familiares y amigos que actualmente luchan al interior de la isla por la liberación de la periodista”, publicó en su muro de Facebook la organización que agrupa a 13 organizaciones de la Sociedad civil en América Latina que defienden la libertad de expresión.

Voces del Sur recordó que desde inicio de año ha conocido de “varias detenciones arbitrarias, interrogatorios, sustracción de equipos y amenazas contra periodistas, directivos y medios de comunicación del ICLEP”.

“Estas agresiones se han producido en varias provincias del país, lo que constituye un ejemplo de la coordinación de los órganos del departamento de Seguridad del Estado, del Ministerio del Interior en la persecución contra los periodistas independientes”, señaló.

Afirma la organización que “la ola represiva del régimen cubano continúa en su afán de eliminar los medios y voces críticas”.

“Voces del Sur condena estas acciones que reflejan el uso abusivo del poder estatal y exige que cese de forma inmediata. Además, ratificamos nuestra solidaridad con los periodistas del ICLEP ante la persecución del Gobierno que viola sistemáticamente sus derechos Humanos”.

“También hacemos un llamado a la comunidad internacional a estar vigilantes de las acciones del Régimen contra periodistas independientes”, concluyó.

La reportera del ICLEP está siendo acusada por un supuesto delito de “desorden Público”, por el que pudiera cumplir hasta un año de privación de libertad y hasta tres, según la modalidad agravada dispuesta en el artículo 201 del Código Penal Cubano.

Junto a los periodistas Mary Karla Ares también se encuentran arrestados, en diferentes unidades de la PNR en La Habana el colaborador de ADN Cuba Esteban Rodríguez y los activistas pacíficos Inti Soto Romero, Thais Mailen Franco Benítez, Lara Yumila, Nancy Vera, Yuisán Cancio Vera, Luis Ángel, Félix Modesto Valdés, Leonardo Romero y Douglas Batista.


Los cubanos también viajan en caravana por Centroamérica



Segun un reportaje de 24FRANCE Los cubanos también viajan en caravana por Centroamérica.

Llegar en balsa a Estados Unidos ya no es una opción para los cubanos. Con la cancelación hace más de dos años de la política 'pies secos, pies mojados', quienes buscan migrar lo hacen por otra ruta. Ahora, además de los centroamericanos, los cubanos se concentran en la frontera entre México y Estados Unidos a la espera de una respuesta a sus solicitudes de asilo.


El destino: Estados Unidos. Miles de cubanos salen de su país para buscar una nueva oportunidad de vida. Algunos aprovechan los permisos de viaje hacia algunos países de Centroamérica para comenzar la travesía a pie desde allí, otros escogen un camino mucho más largo desde Suramérica.

En esa migración pasan por Colombia y llegan hasta el noroccidente del país en los límites con Panamá. En ese sitio se enfrentan a una espesa, calurosa y peligrosa selva conocida como el Tapón del Darién. Son 575.000 hectáreas de bosque sin caminos, donde atraviesan ríos, desafían la humedad y enfrentan a los ladrones que se topan por el camino. Pero a algunos, no les importa .“Yo la pasaría 300 veces con tal de no vivir en el comunismo, asegura Adniel Góngora, migrante cubano desde Bajo Chiquito, en Panamá.

Después de recorrer cientos de kilómetros quedan varados en México. Las trabas administrativas del Gobierno de Donald Trump hacen que la espera se alargue hasta cinco semanas por una respuesta. "Durante noviembre, diciembre, enero e incluso febrero, el número de personas fluctuó significativamente. A veces 30, a veces 120, otras 180", asegura Enrique Valenzuela, vocero del Gobierno de Michoacán en México.

Sin que 'pies secos, pies mojados' sea una opción para los migrantes, nada detiene el flujo migratorio hacia Estados Unidos.

+ Y el dato de migración de la semana: 7.724 migrantes latinoamericanos, asiáticos y africanos llegaron a Panamá cruzando el Tapón del Darién en lo corrido de 2019. 1.151 son niños.


domingo, 18 de abril de 2021

LGBTIQ+: Migración y Derechos Humanos / Enfoques

 

REINALDO RODRIGUEZ HERNANDEZ

Diplomado “Migración y Derechos Humanos: Enfoques”

 Sexilio y Migración: solicitud de refugio, asilo y el tránsito MIGRATORIO de personas LGBTI.

SUMARIO: I. Introducción; II. Movilidad por discriminación y violencia motivadas por condición sexo genérica; III. Marco jurídico; IV. ¿Ciudad amigable?; V. Conclusiones; VI. Bibliografía.

 


TERMINOLOGÍA

 LESBIANA Es una mujer que es atraída física, romántica y/o emocionalmente de manera perdurable por otras mujeres.

 HOMBRES GAYS Gay se utiliza a menudo para describir a un hombre que es atraído física, romántica y/o emocionalmente de manera perdurable por otros hombres, aunque el término gay también se puede utilizar para describir tanto a hombres gays como mujeres (lesbianas).

 BISEXUAL Bisexual describe a una persona que es física, romántica y/o emocionalmente atraída tanto por hombres como mujeres.

 TRANSGENERO El término transgénero describe a las personas cuya identidad de género y/o expresión de género difiere del sexo biológico que les fue asignado al nacer. Transgénero es una identidad de género, no una orientación sexual y una persona transgénero puede ser heterosexual, gay, lesbiana o bisexual.

 INTERSEXUAL El término intersexual o "trastornos del desarrollo sexual" (DSD por sus siglas en inglés) se refiere a una condición en la que un individuo nace con una anatomía reproductiva o sexual y/o patrones de cromosomas que no parecen ajustarse con las típicas nociones biológicas de hombre o mujer. Estas condiciones pueden ser evidentes al nacer, pueden aparecer en la pubertad, o puede que sólo se descubran durante un examen médico.

 ORIENTACION SEXUAL Se refiere a: "la capacidad de cada persona de sentir una profunda atracción emocional, afectiva y sexual por personas de un género diferente al suyo, o de su mismo género, o de más de un género, así como la capacidad de mantener relaciones íntimas y sexuales con estas personas". (Principios de Yogyakarta)

 IDENTIDAD DE GENERO  Se refiere a: "la vivencia interna e individual del género tal y como cada persona la siente profundamente, la cual podría corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo… y otras expresiones de género, incluyendo la vestimenta, el modo de hablar y los modales". (Principios de Yogyakarta)

sábado, 6 de marzo de 2021

En el debate sobre los Derechos Humanos


El pasado mes de febrero, se realizo una videoconferencia de ONG y Asociasiones independientes y tuvo como objetivo iluminar desde nuestras funsiones el ámbito de los derechos humanos, logrando el conocimiento del fundamento de los mismos y el intercambio de experiencias internacionales para propiciar su eficiencia.

¿Podemos considerar que el ser humano es más digno que una lechuga? Esta pregunta, que puede parecer inútil, ha ocasionado acalorados debates,

 Y no es que nos guste discutir  (quizá sí, pero no es la única razón); contestar “sí, claro” es fácil, fundamentar la respuesta en argumentos objetivos, racionales, sin consideraciones emotivas o a priori, no lo es tanto. Detrás de esta inocente pregunta se encuentra una cuestión más importante: qué es la dignidad, quién tiene derechos, qué son los derechos humanos. Hay multitud de respuestas de las cuales se acarrean consecuencias de gran magnitud.

El 10 de diciembre de 1948, en la Asamblea General de las Naciones Unidas se aprobó y proclamó la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Han pasado más de sesenta años y el tema no pierde actualidad. Políticos, abogados, periodistas, mujeres, profesores, ciudadanos, incluso hoy jóvenes y niños abogan por los derechos humanos. 

“Ninguna de las diversas generaciones de derechos ha caído del cielo, sino que todas han sido conquistadas por otras tantas generaciones de movimientos de lucha y de revuelta: primero liberales, luego socialistas, feministas, ecologistas y pacifistas” 

 Sin embargo parece existir un triángulo de las Bermudas entre el discurso y la experiencia cotidiana. Se han multiplicado los organismos nacionales e internacionales que buscan la protección y promoción de los derechos humanos, pero la realidad desborda el trabajo de tantas personas. Existe el derecho a la existencia y a un decoroso nivel de vida, el derecho a la buena fama, a la verdad y a la cultura, el derecho al trabajo, a la libertad de conciencia, y muchos más que parecen no reflejarse, no reconocerse en la vida de millones de seres humanos que todavía hoy padecen hambruna, analfabetismo, enfermedad, opresión y tantas cadenas más o menos sutiles que esclavizan al hombre actual.

El problema no se limita a la eficacia, a los medios para lograr avanzar en el reconocimiento práctico de los derechos humanos. El debate es todavía más profundo, es el debate sobre el origen de los mismos. ¿Cuál es el fundamento de los derechos humanos? Existe gran variedad de teorías, y no da lo mismo una que otra. Unos se niegan siquiera a plantearse el problema, creen que es inoperante e inalcanzable, en todo caso, una pérdida de tiempo. 

Unos apuestan por el consenso suficiente, para ellos basta el voluntarismo jurídico. Otros más descubren un auténtico derecho en toda pretensión de la libertad humana, sobre todo si es el débil que busca rebelarse contra una forma de opresión o discriminación. 

También están aquellos que encuentran en la naturaleza humana el principio de todo derecho universal natural o humano.

 ¿Por qué elegir una teoría y no otra? ¿Por qué aceptamos unos derechos, y otros no? ¿Cuáles deben ser garantizados como fundamentales?

Cada postura tiene repercusiones prácticas. ¿Cómo combinar el derecho a la información con el derecho a la privacidad? ¿Cómo se relacionan el derecho a libertad de expresión con el derecho a la verdad o a la buena fama? ¿Existen los derechos de los animales? ¿Existen los derechos de las plantas? En caso afirmativo, ¿cómo se conjugan con los derechos humanos? Entre tanta ambigüedad, parece que un elemento convergente en la mayoría de las teorías es aquel que identifica la dignidad como fundamento de los derechos humanos. Así lo declaran el preámbulo de la Declaración Universal, Jacques Maritain y Mauricio Beuchot, y muchos otros filósofos lo corroboran.

Ahora bien, cabe preguntarse: ¿qué es la dignidad humana? La posmodernidad se encuentra más cómoda en la indefinición de los términos, pero esta situación corre graves riesgos. Una posibilidad es vaciar de contenido el término dignidad, se vuelve una palabra talismán, atractiva, políticamente correcta pero hueca, sin mayor significado ni trascendencia real. Otra posibilidad es utilizar la expresión dignidad como instrumento de manipulación para intereses particulares. Por ejemplo, si se reconoce la dignidad de los primates se les debe conferir en automático derechos, y la falta de dignidad humana le quitaría los mismos a una persona. ¿Es esto posible? ¿Es justo?

La película “Mar adentro” provocó fuertes polémicas entre los activistas de “Morir con dignidad” y los defensores de la dignidad de una vida con discapacidad. En el corazón del debate estaba la dignidad, pero ¿qué entendía cada bando al afirmarla?

Quizá convenga profundizar en la explicación que de la dignidad da Thomas Williams. Él entiende la dignidad como el puente entre la antropología y la ética. Apartándose de toda ideología, partiendo de la realidad del ser humano, de su esencia, sabremos cómo es y, por lo tanto, cómo obrar con él en verdad y justicia. 

“La palabra latina dignitas, de la raíz dignus, no sólo significa una grandeza y excelencia por las que el portador de esta cualidad se distingue y destaca entre los demás, sino también denota merecimiento de un cierto tipo de trato. Así la dignidad se puede definir como una excelencia que merece respeto o estima” (Williams, p. 32). Cristóbal Colón no inventó América, la descubrió; a nosotros no nos toca inventar al ser humano, nos toca reconocerlo, admirarlo, apreciarlo, en última instancia, respetarlo.


BIBLIOGRAFÍA
1. Beucheot, M. (2008). Filosofía y derechos humanos (los derechos humanos y su fundamentación filosófica). 6ª ed. México: Siglo XXI.
2. Ferrajoli, L. (2009). Sobre los derechos fundamentales y sus garantías. Trad. Miguel Carbonell et al. México: CNDH.
3. Torralba, F. (2005). ¿Qué es la dignidad humana? Ensayo sobre Peter Singer, Hugo Tristram Engelhardt y John Harris. Barcelona: Herder.
4. Williams, T. (2003). La dignidad de la persona humana. Roma: Ecclesia, XVII.

Debate actual ¿nuevos derechos?


A través del tiempo se ha verificado una amplia, variada e interminable pretensión de ampliación de derechos. Cabe preguntarse, ¿toda demanda es justa? Si se quiere reconocer y proteger toda petición como derecho humano necesariamente se vulneran otros ya reconocidos. ¿Existen criterios o principios para discernir entre lo que es un auténtico derecho humano y un deseo sin fundamento en la persona humana? No cabe duda de que la demanda sea subjetivamente válida, genuina y profunda en sus convicciones, pero ¿existen parámetros de objetividad que pongan límite a la creatividad subjetiva epistemológica? Es necesario tomar en cuenta la condición del ser humano. Los límites no son malos en sí mismos, no tienen que ser interpretados como violencia necesariamente. Límites adecuados dan estructura, solidez, encausan las acciones y son un antídoto contra la anarquía. Pero por otro lado, ¿qué los hace adecuados? Cuando los límites tienen un carácter absoluto se vuelven asfixiantes. ¿Se puede construir una cultura de derechos humanos sobre el postulado: si yo lo quiero es bueno? ¿Cuáles son los límites al concepto de derechos humanos?

La expresión “derechos humanos” es moderna, pero su procuración, su anhelo, se puede constatar a lo largo de la historia. Un parteaguas definitivo que le dio autoridad y reconocimiento a la expresión fue sin duda la Declaración Universal de los Derecho Humanos (10-XII-1948). La DUDH ha inspirado más de setenta tratados internacionales para protegerlos y aplicarlos. Si bien no es jurídicamente un documento vinculante se le reconoce autoridad moral y orientativa. Es punto de referencia para las constituciones y legislaciones de muchos países. De la proclamación de los derechos, la Organización de las Naciones Unidas, así como la mayoría de sus estados miembros, se ha preocupado por la protección y aplicabilidad de los mismos a través de numerosas conferencias, pactos y medidas legislativas.

 Desde sus inicios se reconoció que la DUDH no era exhaustiva ni definitiva, pues está sujeta a interpretaciones, justificaciones, al derecho positivo aterrizado en cada momento y lugar; en otras palabras, se adecuan a la conciencia moral del mundo. Para algunos juristas y filósofos los derechos humanos parecen una veleta a merced del tiempo y las circunstancias históricas, mientras que para otros son más bien velas (movidas por el viento) pero ancladas en el barco de la naturaleza humana.

El Big -Bang de los derechos humanos experimentado tras la Segunda Guerra Mundial presenta un nuevo desafío. Hoy surgen numerosas pretensiones de nuevos derechos y no hay un criterio sólido para verificar cuál sí es un derecho humano auténtico y cuál no. Entre más se alarga la lista de derechos humanos, más difícil es su tutela. Si se aceptan todos de forma indiscriminada se niegan necesariamente otros derechos (pasados o futuros). Este desafío implica reflexionar sobre los fundamentos de los derechos humanos. Después de todo, la historicidad no es arbitraria, sino fruto de una orientación conceptual. Las ideas que se tengan sobre los cimientos, sobre la esencia de los derechos humanos, traen como consecuencia determinados paradigmas que aceptan o rechazan positivar, proteger y/o promover nuevos derechos.

 


[1] La respuesta más común es: el bien común limita a los derechos humanos; pero resulta que ésta es una realidad también ambigua, difícil de definir. Además, ¿quién define que atenta contra el bien común y qué no?

[2] Conferencia Internacional de Derechos Humanos (Teherán, abril a mayo de 1968); la Declaración y el Programa de Acción de Viena (junio 1993)  y múltilples instrumentos más.